Con el paso de los años, es normal que la piel del rostro pierda firmeza y aparezcan arrugas, especialmente alrededor de los ojos. Si notas que tu mirada parece más cansada o envejecida, pero no quieres recurrir a una cirugía, el láser de CO2 fraccionado puede ser la solución que buscas. Se trata de un tratamiento médico-estético eficaz y seguro que rejuvenece la mirada y el rostro. 

Esto se consigue mejorando las imperfecciones de la piel, cosa que devuelve luminosidad al rostro. Te explicamos cómo el Láser CO2 rejuvenece la mirada y el rostro sin cirugía.

¿Qué es el láser de CO2?

El láser de CO (dióxido de carbono) es un tipo de láser que actúa sobre las capas superficiales de la piel, eliminando las células dañadas y estimulando la producción natural de colágeno. Esto permite que la piel se regenere de forma progresiva, dando lugar a una piel más lisa, firme y joven.

La versión más avanzada es el láser de CO fraccionado, que actúa de forma precisa y controlada, deja zonas de piel sana entre los puntos tratados. Esto acelera la recuperación y reduce el riesgo de complicaciones y rejuvenece la mirada y el rostro sin cirugía.

¿Cómo el láser de CO₂ fraccionado rejuvenece la mirada y el rostro?

Este tratamiento se utiliza principalmente para:

  • Rejuvenecer el contorno de ojos y la piel del rostro
  • Eliminar arrugas finas y líneas de expresión
  • Reducir la flacidez leve
  • Mejorar la textura de la piel
  • Tratar manchas solares y por la edad
  • Corregir cicatrices de acné o quirúrgicas

¿Quién puede hacerse el tratamiento con láser CO₂?

El láser de CO₂ está indicado para personas que:

  • Quieren mejorar su aspecto sin pasar por quirófano
  • Presentan arrugas finas o moderadas, sobre todo en los párpados inferiores y las “patas de gallo”
  • Tienen manchas, cicatrices o poros dilatados
  • Desean tensar la piel y recuperar firmeza facial

Es un tratamiento muy habitual a partir de los 40 años, aunque puede realizarse antes en función del tipo de piel y los objetivos estéticos del paciente.

Contraindicaciones: ¿en qué casos no se recomienda?

El láser de CO2 no está indicado en personas que:

  • Tienen infecciones activas en la piel (como herpes o acné inflamatorio)
  • Presentan enfermedades autoinmunes o problemas de cicatrización
  • Tienen la piel muy oscura (fototipos V y VI), por mayor riesgo de manchas
  • Están embarazadas o en periodo de lactancia
  • Han tomado isotretinoína (acné) recientemente

¿Cómo es el procedimiento con Láser CO2?

El tratamiento se realiza en una consulta médica especializada, sin necesidad de quirófano. Se aplica anestesia tópica en crema y, si es necesario, anestesia local inyectada en la zona a tratar.

  1. Se limpia la piel y se protege la zona de los ojos.
  2. El médico aplica el láser en la zona deseada, ajustando la potencia y la profundidad.
  3. El procedimiento dura entre 20 y 45 minutos, según el área tratada.

¿Cómo es la recuperación?

Después del tratamiento, es normal que la piel esté enrojecida y ligeramente inflamada, como si se tratara de una quemadura solar leve.

  • Primeros 2-3 días: la piel estará roja e hinchada.
  • Días 4 a 7: se inicia una leve descamación.
  • A partir de la semana: la piel ya tiene un aspecto mejorado y puede maquillarse si se desea.

Durante las primeras semanas es fundamental:

  • Usar protector solar a diario
  • Evitar la exposición solar directa
  • Mantener la piel hidratada y seguir las indicaciones del médico

¿El láser CO2 Puede sustituir a una blefaroplastia?

El láser de CO2 puede ser una alternativa a la blefaroplastia (cirugía de párpados) en casos leves de flacidez o exceso de piel. No elimina grandes bolsas ni piel sobrante, pero sí mejora notablemente el aspecto de los párpados inferiores, reduce las arrugas y tensa la piel.

En otros casos, se utiliza como complemento a la blefaroplastia quirúrgica. Por ejemplo, semanas después de la intervención, para mejorar la textura de la piel y potenciar los resultados estéticos.

 Conclusión

El láser de CO2 fraccionado rejuvenece la mirada y el rostro sin cirugía y es un tratamiento avanzado, sencillo, eficaz y seguro. Ideal para quienes buscan una piel más firme, luminosa y uniforme, con resultados visibles y naturales.

Si te preocupa el aspecto de tu mirada o quieres mejorar tu piel, consulta con nuestros especialistas en oculoplastia. Un buen diagnóstico es clave para elegir el tratamiento más adecuado según tu tipo de piel y tus objetivos.

 

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