La PRK (photorefractive keratectomy) es una técnica de ablación corneal superficial mediante láser excimer.
Esta técnica fue aprobada por la FDA en el año 1995 y desde entonces millones de ojos han sido intervenidos con éxito mediante su uso.
La PRK se realiza con gotas de anestésico. Tras retirar el epitelio corneal, se aplican impactos de láser sobre el espesor corneal.