Índice de contenidos
¿Qué es el derrame ocular?
El derrame ocular, o técnicamente hipofagma, es una hemorragia subconjuntival o sea, la liberación de sangre en la conjuntiva ocular debida a la rotura de un vaso capilar de la misma. Esto aparece en forma de mancha roja en la esclerótica del ojo (la parte blanca). La conjuntiva es una membrana transparente que recubre la esclerótica. Cuando la conjuntiva se inflama, el ojo se enrojece, pica, se inflama, llegando en ocasiones a segregar legañas, hablamos de conjuntivitis.
¿Cuándo debo preocuparme?
En principio, el derrame ocular en sí es algo llamativo pero no preocupante. Suele reabsorberse solo y es debido a una causa concreta, generalmente inocua.
¿Por qué se produce un derrame en el ojo?
La causa genérica es un aumento súbito en la presión arterial. Éste puede estar producido por:
- Un estornudo o tos intensa.
- Un episodio de hipertensión arterial.
- Toma de anticoagulantes orales, o ácido acetilsalicílico (diluyen la sangre y es más fácil que se extravase).
- Traumatismo, golpe en el ojo, o presión sobre el ojo.
Un aumento repentino en la presión intraocular, o una cirugía ocular también pueden originarlo.
Tratamiento del derrame ocular
En general, no es necesario realizar ningún tratamiento y el derrame ocular se reabsorbe solo en un par de días.
En ocasiones, puede causar alguna molestia que mejora con el uso de lágrimas artificiales, pero las lágrimas artificiales no eliminan el derrame, tan sólo mejoran la posible sensación de irritación que se pueda producir.
¿Cuánto tiempo puede durar un derrame en el ojo?
Lo más común es que el derrame en el ojo desaparezca en un par de días a lo sumo. Esto es así cuando la causa es un estornudo, tos o golpe.
En el caso de que la causa sea la hipertensión arterial o la toma de anticoagulantes orales, o una cirugía ocular, se puede alargar hasta un par de semanas.
¿Qué pasa si no se trata?
Como hemos explicado, generalmente no es necesario ningún tratamiento. En caso de que los derrames se produzcan con frecuencia, duren más de un par de semanas, sean intensos o vayan acompañados de dolor en el ojo o disminución de la visión, es necesario consultar al oftalmólogo lo antes posible.
Si tienes cualquier duda al respecto, consulta con nuestros profesionales.