Erosión corneal por rozadura de mascarilla
El uso continuado de la mascarilla nos protege del contagio de la Covid19, pero nos estamos encontrando con un nuevo motivo de consulta urgente debido a roces o golpes en los ojos al ponerse o moverse la mascarilla. ¿Qué debo hacer si me daño el ojo con la mascarilla?
Si la mascarilla se coloca adecuadamente, queda cerca de los ojos y, es fácil rozar o golpear la córnea al colocarla o moverla. La rozadura que se ocasiona puede dar lugar a erosiones corneales de distinta consideración, que requieren atención oftalmológica urgente dado que, en muchos casos, requieren de una cura, oclusión ocular y tratamiento con pomada antibiótica, corticoide y epitelizante.
¿Qué debo hacer si me daño el ojo con la mascarilla? Consejos para el uso correcto.
Para evitar lastimarse los ojos, y además, para que resulte efectivo el uso de la mascarilla, debemos poner especial atención en su manipulación y colocación. Se recomienda higienizarse las manos, sostener la mascarilla con una mano tapando boca y nariz, tirar de ambos extremos en dirección al rostro y colocar las gomas tras las orejas. Posteriormente es necesario ajustar la tira superior metálica sobre la nariz presionándola con los dedos, y tirar de la parte inferior de la mascarilla desde la barbilla para asegurarte de que se ajusta bien.
Es importante, a lo largo del día, no tocarla con las manos para no contaminarla y recolocarla desde las gomas laterales. Es, en el momento en que se realizan estas maniobras, cuando hay que tener especial cuidado en no rozarse los ojos.
Las sociedades médicas recomiendan no utilizar más de 4 horas seguidas la mascarilla quirúrgica y no más de 8 horas la FFP2. Las mascarillas de tejidos diversos no son efectivas a menos que el tejido tenga un recubrimiento homologado por la CE para protección de la Covid19, o que se le añada un filtro que cumpla estas características.