Los bastones de la retina no son ciegos a la luz brillante sino que más bien contribuyen a la visión fotópica. Investigadores de varias instituciones han descubierto que la contribución de los bastones en retinas de ratones es mucho mayor de lo que hasta ahora se pensaba. Con los bastones no podemos distinguir colores y siempre se pensó que son inútiles a medida que aumentan los niveles de luz, mientras que la visión fotópica o en condiciones de luz diurna depende de los fotorreceptores denominados conos.
Estas afirmaciones pueden verse en la mayoría de los textos de fisiología ocular, pero un nuevo estudio publicado en NATURE COMMUNICATIONS acaba de demostrar que los bastones sí contribuyen a la visión diurna o fotópica e incluso aumenta su contribución con luz brillante de cualquier entorno natural.
Para demostrarlo, emplearon ratones transgénicos sin conos funcionales en los que midieron primero las señales impulsadas por los bastones y pudieron detectarlas con fiabilidad tanto en la retina como en el cerebro, incluso a altos niveles de luz. Después pudieron demostrar en ratones con conos completamente funcionales que también existe esa contribución de los bastones a la visión con luz brillante.
Con dichos datos los investigadores diseñaron un modelo que no solo explica cómo los bastones se ven tan bien con poca luz sino que también continúan funcionando con luz brillante.
No se puede negar que los conos pueden funcionar con luz brillante mucho mejor y mucho más fiable pero estos nuevos conocimientos pueden abrir nuevas vías hacia tratamientos para pacientes sin conos funcionales o pacientes sin visión funcional de los conos, esto es, para las personas con monocromatismo de bastones
Fuente:
Prof. Carlos Luis Saona Santos
Optometrista