¿Conoces los medicamentos que afectan a la visión? El médico prescriptor debe informarte de ello. Si no lo ha hecho, busca tu medicación en este artículo para comprobarlo.
Muchas veces, los médicos tenemos que sospesar pros y contras a la hora de recetar un medicamento a un paciente. En ocasiones, debemos asumir un cierto riesgo con los efectos secundarios para obtener un mayor beneficio. Por ejemplo, en el caso de tratamiento de algunos tipos de cáncer, la quimioterapia genera muchos efectos secundarios. Sin embargo, el coste y riesgo de no administrarla es demasiado elevado, mientras que el beneficio puede ser que directamente el paciente se cure. Eso no tiene precio.
Al igual que cuando nos operan, el cirujano nos informa de las complicaciones que pueden surgir, cuando nos prescriben un medicamento, debemos estar informados de los efectos secundarios que puede tener.
El conocimiento de esta información no debe de ser un factor de preocupación y ansiedad que nos genere reticencia a realizar el tratamiento. Debemos confiar en la capacitación del médico prescriptor y en el hecho de que ha hecho una correcta valoración previa de pros y contras. Este conocimiento sirve para detectar a tiempo estos posibles efectos secundarios y consultar al médico, en el caso de que se produzcan, para que sea él quien determine si es necesario suspender o modificar el tratamiento.
Índice de contenidos
Estos son los medicamentos que afectan a la visión
A continuación enumeraremos los distintos medicamentos que pueden afectar a la visión. En caso de requerir tratamiento prolongado con alguno de ellos, es necesario acudir al oftalmólogo ante cualquier síntoma descrito o, en su defecto, cada seis meses para realizar exámenes periódicos que permitan detectar precozmente y tratar cualquier posible daño ocular. Con este diagnóstico en la mano, podrás podrá consultar al médico que te ha prescrito el tratamiento si debes seguir con el mismo, modificarlo o suspenderlo.
Medicamentos antibióticos que afectan a la visión
Las tetraciclinas se recetan para combatir infecciones bacterianas del aparato respiratorio, digestivo, urinario, reproductor, linfático o de la piel.
Las tetraciclinas pueden ocasionar neuropatía óptica. La neuropatía óptica se produce cuando al nervio óptico no le llega sangre suficiente. Esto ocasiona pérdida visual.
Tratamientos prolongados con corticoesteroides
Un tratamiento prolongado con corticoesteroides (cortisona), puede ocasionar un aumento de la presión intraocular, con el consiguiente riesgo de desarrollar de glaucoma.
También puede afectar a la retina generando una coriorretinopatía serosa central, o sea, una acumulación de líquido debajo de la retina, cosa que la desprende en su parte posterior, afectando a la visión. Este problema puede requerir tratamiento con láser fotocoagulador, inyeccciones intraoculares de medicación anti-factor de crecimiento endotelial o terapia fotodinámica entre otros.
Por último, un tratamiento prolongado con corticoesteroides puede provocar la aparición de cataratas subcapsulares, o acelerar la progresión de las cataratas seniles.
Anticolinérgicos, otro de los medicamentos que afectan a los ojos
Los anticolinérgicos se utilizan para tratar la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), o el síndrome de la vejiga hiperactiva.
Esta família de medicamentos puede ocasionar la siguiente afectación al sistema visual:
- Visión borrosa temporal
- Ojo seco
- Glaucoma de ángulo cerrado, en personas hipermétropes con ángulos de drenaje estrechos
Tratamiento con Cloroquina o hidroxicloroquina
La cloroquina o la hidroxicloroquina se utilizan en el tratamiento de enfermedades reumáticas como la artritis reumatoide o el lupus eritematroso sistémico.
Esta medicación puede afectar al cristalino, la córnea y/o la pigmentación de la mácula, ocasionando la enfermedad conocida como retinopatía de ojo de buey. Se conoce con este nombre por el aspecto que adquiere la mácula afectada, y que recuerda al ojo de un buey. Esta maculopatía ocasiona fotofobia, disminución de la agudeza visual y dificultad de visión nocturna (nictalopía). El diagnóstico precoz es fundamental para poder controlar la pérdida visual en la medida de lo posible.
Tratamiento con Tamoxifeno
Otro de los medicamentos que afectan a la visión es el Tamoxifeno, un bloqueante hormonal que se utiliza en el tratamiento del cáncer de mama de origen hormonal.
Este medicamento puede afectar a la retina, generando cambios en el epitelio pigmentario que afectan a la agudeza visual y a la visión del color.
Inhibidores de la tirosina quinasa
Los inhibidores de la tirosina quinasa se utilizan para bloquear la acción de la proteína cinasa, en el tratamiento de distintos tipos de cáncer. Pertenecen a esta família, el gefitinib, erlotinib, sunitinib, lapatinib, nilotinib y dasatinib.
Estos medicamentos pueden afectar a la circulación sanguínea de la retina, originando la oclusión de la vena central de la retina o una retinopatía serosa.
Tratamiento con Digoxina
La Digoxina se utiliza en el tratamiento de la insuficiencia cardiaca.
Puede ocasionar visión amarillenta, visión borrosa y/o escotoma centelleante. El escotoma centelleante se forma en el cerebro y ocasiona la visión de luces centelleantes que se inician en el centro de la visión y se expanden en forma de zig zag. Generalmente dura una media hora y suele ir acomañado de migraña o dolor de cabeza.
Puede requerir tratamiento antiinflamatorio.
Tratamiento con antiarrítmicos, medicamentos que afectan a la visión
La amiodarona se utiliza en el tratamiento de las arritmias, para prevenir las alteraciones en el ritmo cardíaco.
La afectación que suelen producir es la llamada queratopatía en vórtice, que consiste en la formación de depósitos corneales. Suele ser asintomática y no precisa interrumpir el tratamiento. Sin embargo, los depósitos corneales avanzados pueden afectar a la visión en forma de neuropatía óptica (afectación al nervio ocular y, por tanto, a la visión). Este caso debe ser valorado por el retinólogo.
Tratamiento con tiazolidinedionas
Las tiazolidinedionas, como pioglitazona (Actos) y la rosiglitazona (Avandia), se utilizan en el tratamiento de la diabetes en personas con resistencia a la insulina.
Esta família de medicamentos puede empeorar el pronóstico de la retinopatía diabética preexistente, en concreto, el edema macular debido a la retención sistémica de líquidos que producen.
Tratamiento con Bifosfonatos
Los biofosfonatos son otros de los medicamentos que afectan a la visión, se utilizan en el tratamiento de la osteoporosis.
Estos medicamentos pueden ser de administración por via oral: Alendronato (Fosamax), risedronato (Actonel) e ibandronato (Boniva), o por vía intravenosa: pamidronato, ibandronato y ácido zoledrónico (Reclast, Zometa).
Los biofosfonatos pueden afectar a la conjuntiva, a la córnea o a la úvea. Las principales patologías que provocan son cojuntivitis (quemosis conjuntival, epiescleritis, escleritis, queratitis (edema del lente), uveítis (visión borrosa), enfermedad orbital inflamatoria, y la desestructuración de la córnea y la esclerótica.
Tratamiento con Alopurinol
El alopurinol se utiliza en el tratamiento de la Gota y puede provocar la aparición prematura de cataratas, por lo que puede catalogarse como otro medicamento que afecta a los ojos.
Tratamiento con Sildenafil
El Sildenafil se utiliza en el tratamiento de la disfunción eréctil.
Puede ocasionar visión borrosa transitoria, percepción alterada del color, Coriorretinopatía serosa central, Neuropatía óptica isquémica no arterítica, Oclusión de la arteria cilioretiniana y coriorretinopatía serosa central
Tratamiento con tamsulosina
La Tamsulosina és una antagonista del receptor adrenérgico alfa 1, utilizado para tratar la hipertrofia prostática (engrosamiento de la próstata).
Este tratamiento puede ocasionar iris flácido intraoperatorio. Aunque pueda no ocasionar molestias, es necesario advertir al cirujano de que se está tomando esta medicación, antes de una operación de cataratas, ya que la flacidez del iris aumenta enormemente la posibilidad de dañar el iris o la cápsula posterior durante las maniobras operatorias.
Tratamiento con Etambutol
El Etambutol se utiliza en el tratamiento de la tuberculosis y puede afectar al nervio óptico y, en consecuencia, a la visión.
Tratamiento con vigabartina
La vigabartina es un medicamento antiepiléptico que puede originar la constricción del campo visual, reduciendo la visión.
Tratamiento con Fingolimod
El Fingolimod se utiliza en el tratamiento de la esclerosis múltiple y puede causar edema macular
Fenotiazinas, otro de los medicamentos que afectan a la visión
Las fenotiazinas se utilizan en el tratamiento de algunas enfermedades mentales y pueden ocasionar cambios en el epitelio corneal y edema corneal. En casos leves, se puede intentar eliminar el fluido edematoso con pomadas hipertónicas. En casos severos puede requerir una DSAEK o queratoplastia, trasplante corneal endotelial.
Estos medicamentos son la Clorpromacina, la Clozapina, la Flufenacina, el Haloperidol, la Loxapina, la Molindona, la Perfenacina y la Pimocida.
Dudas sobre medicamentos que afetan a la visión
Si estás en tratamiento con alguna de estas medicaciones y no lo has hecho ya, te recomendamos que pidas cita con el oftalmólogo, a fin de que pueda estudiar el estado de tu retina, tu córnea y tu conjuntiva y poder hacer seguimiento y detectar, de forma precoz, la aparición de complicaciones.
Nuestro equipo de oftalmólogos estará encantado de resolver cualquier duda sobre la prescripción de medicamentos que afectan a los ojos.
